Una ilusión necesaria

El viento me hizo entender la idea del amor,

mientras la lluvia caía sobre el cristal de mi ventana lo supe.

Eso, a lo que tanto temen o añoran

y en realidad casi nadie conoce

es solo una fantasía parecida a la poesía.

Pero esa ilusión es necesaria.

Cuando los ojos están agotados por el dolor,

el insomnio te atrapa cada noche,

cuando la nada ya tiene sabor,

tu espíritu está vencido,

y la soledad te atrapa de golpe.

En ese momento sólo te quedan dos opciones.

Condenarte, dejar que tu alma se pudra

y convertirte en un en miserable destructor de corazones.

O liberarte,

dejar que el suspiro del Sol alegre tu tarde,

comprender que todo es increíblemente más fácil de lo que parece,

llenar tu vida de sonrisas al volver a creer en las palabras de quienes te aman.

Y entonces,

no solo comenzar a practicar esa ilusión con otros

si no también hacerlo en ti mismo.

Deja un comentario